La Inteligencia Real de Lundero
La Inteligencia Real de Lundero
El vocablo “lundero”, según investigaciones y ensayos del recordado autor Nicomedes Santa Cruz, podría haberse referido al bailarín del “lundú”, danza de origen africano muy difundida en tiempos de la antigua y legendaria ciudad de Saña, ubicada en lo que hoy es el departamento de Lambayeque. Según el maestro Santa Cruz, la palabra “tondero”, que denomina a una conocida y hermosa danza característica de la costa norte del Perú, es una derivación del término ”lundero”.
Resulta que esta palabra de centenarias raíces peruanas es el nombre que con orgullo lleva la empresa peruana Lundero, quien brinda soluciones tecnológicas en el mercado Latinoamericano desde hace 5 años, automatizando los procesos de negocios en las instituciones públicas y privadas mediante su novedoso sistema integrado denominado iAmauta, el cual incorpora en su núcleo, una poderosa y comprobada herramienta de Inteligencia Artificial. El nombre de IAmauta posee también un gran simbolismo pues integra el acrónimo IA, de inteligencia artificial, con la palabra quechua AMAUTA que significa maestro, en alusión a los avanzados y probados modelos de Inteligencia Artificial que incorpora y que se encuentran listos para su inmediato uso en los procesos de negocio de las organizaciones.
Lundero se encuentra llevando a cabo varios importantes proyectos en distintos países del continente, como Costa Rica, Nicaragua y Perú. Estos proyectos son el Sistema Nacional Integrado de Gestión de Riesgos (SINIGER) que se centra en gestionar los riesgos aduaneros y tributarios en el Ministerio de Hacienda de Costa Rica; el Sistema de Control de Gestión en las Administraciones de Aduanas de Nicaragua y; en Perú, el Sistema Gestión de Riesgos para la Ventanilla Única de Comercio Exterior (VUCE 2.0).
El núcleo de estos tres proyectos es IAmauta, la solución tecnológica desarrollada por Lundero, que permite gestionar de manera integral e inteligente los procesos de negocio, las reglas de negocio que los gobiernan y sus riesgos inherentes. El sistema actúa de forma inteligente y asertiva, elimina las tareas rutinarias de los procesos, descubre patrones de comportamiento con el empleo de inteligencia artificial (IA), y consecuentemente, reduce los tiempos y costos de los procesos, mejora su desempeño y permite que las personas se concentren en las tareas con mayor valor agregado.
Lundero brinda actualmente sus servicios en América Latina a los sectores del comercio exterior y tributos internos, y tiene planeado en el mediano plazo, incursionar en los sectores de la banca y la salud. De esta forma Lundero logró en el año 2020 una participación del 2.4% en el mercado de exportación de software peruano, en el año 2021 se alcanzó una participación del 2.6% y para el año 2022, proyectamos alcanzar 3.3% del citado mercado.
Hoy en día Lundero compite con importantes empresas transnacionales, que le motivan a mejorar constantemente sus niveles de calidad, tanto en las herramientas tecnológicas como en las metodologías de trabajo que emplean, así como en la calificación profesional de su personal y por supuesto, en los productos y servicios que brinda. La cultura de Lundero se basa en la confianza, en el involucramiento y comprensión de las necesidades de los clientes, en el planteamiento de soluciones innovadoras con enfoque sistémico y, en el trabajo arduo y apasionado.
Estos son los frutos de un sueño que se inició hace aproximadamente 20 años, cuando el Ingeniero Oscar Camacho Carrillo[1], socio fundador y CEO de Lundero, decidió dejar con nostalgia su posición en la administración aduanera (antigua SUNAD[2]) y empezar a construirse un futuro independiente, que lo llevó a trabajar como consultor internacional para diversas instituciones y organismos regionales en Latinoamérica, financiadas principalmente por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Cooperación Alemana GIZ, la Agencia de Desarrollo USAID, Center for International Private Enterprise (CIPE) y United States Department of the Treasury.
Lundero tiene inteligencia para idear soluciones innovadoras, así como la capacidad y valentía para competir en un mercado mucho más amplio. Y esta inteligencia no es artificial, es real.
[1] El Ingeniero Camacho nació en San Antonio – Cañete. Realizó sus estudios de Ingeniería de Sistemas en la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI). Es Magister en Gestión de Riesgos por la Universidad Rey Juan Carlos (España), Magister en Business Intelligence por la Universidad de Barcelona (España) y candidato a Magister en Administración de Empresas por la Universidad de Pacífico (UP).
[2] SUNAD: Superintendencia Nacional de Aduanas.